Siento que me conoces demasiado bien. Que conoces mi historia, mis luces, y mis sombras. Y sin juzgarme diste tu mano para levantarme en cada una de mis caídas. Y yo, segura de mi misma, rechacé cada una de las oportunidades, cayendo. Y ahora siento que no puedo parar, que la oscuridad es parte de mi, ya no soy yo, ya no se lo que soy. Y sigues a mi lado, dispuesta a hacer que escape, que corra, rápido, más rápido. Que escape de todas esas sombras, aunque te estas cayendo a mi lado, estas cayendo conmigo. Quieres salvar a alguien insalvable, quieres ver luz donde hace tiempo se apagó la última llama. Quieres ver salvación donde ya ni hay. Ves todo de manera optimista pero no te das cuenta que ya es demasiado tarde, ya no tengo cura, no tengo perdón. La oscuridad ciega mi pensamiento, soy incapaz de ver aquello que me dices, incapaz de parar. Y quiero aferrarme a algo, y quiero aferrarme a ti, porque se que tu amistad es verdadera, porque se que serás capaz de sacarme de la oscuridad, porque se que aun puede cambiar todo. Y no me juzgarás.
Y se tantas cosas, que no se como escribirlo todo de golpe. Y se que te necesito a mi lado, porque soy egoísta, y no quiero caer sola en la oscuridad, no quiero verme absorbida por un mundo de odio, un mundo que yo sola he creado. Que mi mente ha creado. Y soy egoísta, muy egoísta, por quererte en un mundo lleno de sombras, solo para no estar sola.
Y eso es todo por hoy. Espero que os haya gustado y os invito a comentar en el blog.
Un beso y un abrazo
Yahira Potter
Me ha encantado el texto! Que bonito
ResponderEliminarawesome article.
ResponderEliminarthanks for sharing and have a nice day :)
Muy lindo texto te mando un beso
ResponderEliminarHola.
ResponderEliminarWow, cuánto drama... quizás hace algunos años me habría decantado por una amistad así, por aquella que me necesita a pasar de parecer todo lo contrario por su actitud, pero ahora, ya adulta, veo que ese tipo es, en efecto, egoísta, que no quiere se salvada :V y uno debe hacerse el duro a veces para no caer en las garras de gente así.
Uno puede querer ayudarla mucho e intentar una y otra vez, pero en algún punto hay que parar y dejarla ir. Suena... ¿egoísta también? Quizás no tanto.
Pero cuando maduras y creces y has pasado por eso varias veces, aprendes a desearle buena suerte a gente así luego de tantos intentos e irte y ver por ti para no ser arrastrado de esa misma manera. Porque uno está ahí para ellos pero nadie está ahí para ti y no es justo. El primero que debe estar ahí para ti, eres tú mismo.
Pero bueno, es una carta muy intensa con sentimientos comunes, pero bien escrita.
Saludos :D